Descripción:
Una EVALUACIÓN DE LA PIEL permite conocer el estado físico general del paciente, basándose en una inspección y palpación cuidadosas de la piel y en la documentación de los hallazgos. A continuación, se indican algunos componentes de una buena evaluación de la piel.
Tome una historia clínica completa
Obtenga un historial de la condición de la piel del paciente a partir del paciente, su cuidador o de registros médicos previos. Revise el historial familiar detallado con el paciente o su familia y asegúrese de que se revisen todas las condiciones de la piel.
Obtenga también un historial de la rutina de baño del paciente y de los productos para el cuidado de la piel. Documente los jabones, champús, acondicionadores, lociones, aceites y otros productos tópicos que el paciente utiliza habitualmente. Pregúntele al paciente:
- sobre cambios en la piel como xerosis (sequedad de la piel), prurito, heridas, erupciones o cambios en la pigmentación o el color de la piel
- Si la apariencia de la piel cambia con las estaciones.
- sobre cualquier cambio en el grosor de la uña, si se parte, se decolora, se rompe y se separa del lecho ungueal. Un cambio en las uñas del paciente puede ser un signo de una afección sistémica.
- sobre alergias, incluidas aquellas a medicamentos, productos tópicos para la piel y heridas, y alimentos.
- Documente sus hallazgos en la historia clínica.
Realizar una evaluación física:
Esto incluye la evaluación del color de la piel, la humedad, la temperatura, la textura, la movilidad y la turgencia, y las lesiones cutáneas. Inspeccione y palpe las uñas de las manos y de los pies, observando su color y forma y si hay lesiones presentes.
Color | Causa | Distribución | Seleccione condiciones |
---|---|---|---|
Marrón | Oscurecimiento del pigmento melanina. | Generalizado | Enfermedades de la hipófisis, suprarrenales y hepáticas |
Nevos, neurofibromatosis | |||
Blanco | Ausencia de pigmentación | Generalizado | Albinismo |
Localizado | Vitíligo | ||
Rojo (eritema) | Aumento del flujo sanguíneo cutáneo | Localizado | Inflamación |
Generalizado | Fiebre, exantemas virales, urticaria. | ||
Aumento de glóbulos rojos intravasculares | Generalizado | Policitemia | |
Amarillo | Aumento de la pigmentación biliar (ictericia) | Generalizado | Enfermedad del hígado |
Aumento de la pigmentación del caroteno. | Generalizado (excepto esclerótica) | Hipotiroidismo, aumento de la ingesta de verduras que contienen caroteno. | |
Disminución de la visibilidad de la oxihemoglobina. | Generalizado | Anemia, enfermedad renal crónica | |
Azul | Aumento de hemoglobina insaturada secundaria a hipoxia | Labios, boca, lechos ungueales. | Enfermedades cardiovasculares y pulmonares |
Las lesiones cutáneas pueden clasificarse como primarias o secundarias, aunque la distinción no siempre es clara. Asegúrese de utilizar el término correcto para describir cualquier lesión que encuentre. Las siguientes son lesiones primarias :
mácula , un área plana, no palpable y circunscrita (hasta 1 cm) de cambio de color que puede ser marrón, rojo, blanco o tostado
parche , una lesión plana, no palpable con cambios en el color de la piel, de 1 cm o más
pápula , lesión elevada, palpable, firme y circunscrita de hasta 1 cm
placa , lesión elevada, plana, firme, rugosa y superficial de 1 cm o más, a menudo formada por coalescencia de pápulas
nódulo , un área elevada, firme, circunscrita y palpable de más de 0,5 cm; suele ser más profunda y firme que una pápula
quiste , un nódulo lleno de un material líquido o semisólido que se puede exprimir
vesícula , ampolla palpable, elevada, circunscrita, superficial y llena de líquido de hasta 1 cm
bulla , una vesícula de 1 cm o más, llena de líquido seroso
pústula , que es elevada y superficial, similar a una vesícula, pero está llena de pus
roncha , área de edema cutáneo localizado, elevada, de forma irregular y relativamente transitoria. La mayoría de las ronchas son rojas, rosadas pálidas o blancas.
Las lesiones secundarias pueden ser causadas por la progresión de la enfermedad, el tratamiento excesivo, el rascado excesivo o la infección de una lesión primaria:
escama , una fina capa de epidermis muerta exfoliada
costra , residuo seco de exudados de la piel como suero, pus o sangre
Liquenificación , engrosamiento visible y palpable de la epidermis y engrosamiento de la piel con mayor visibilidad de los surcos normales de la piel (a menudo debido al roce crónico)
excoriación , pérdida lineal o puntiforme de la epidermis, generalmente debida al rascado.
Cuidado con la piel seca
En los centros de cuidados a largo plazo, los problemas cutáneos más comunes son la xerosis y el prurito. Entre el 59% y el 85% de los pacientes mayores de 64 años tienen piel seca. Más del 70% de los pacientes hospitalizados y el 90% de los residentes de residencias de ancianos mayores de 65 años tienen piel seca. Muchos factores contribuyen a la sequedad de la piel, entre ellos un entorno con baja humedad, los hábitos personales del paciente (tabaquismo, consumo de alcohol y mala nutrición), los cambios estacionales, las enfermedades crónicas, los medicamentos y los limpiadores de la piel.
La xerosis es la causa más frecuente de prurito. La piel del paciente puede estar áspera y escamosa, y la sequedad se presenta con mayor frecuencia en la parte inferior de las piernas, las manos y los antebrazos. La sequedad de la piel no suele estar asociada a una afección dermatológica o enfermedad sistémica. El rascado puede causar excoriaciones, que pueden progresar a un eczema secundario o una infección cutánea.
Una vez que haya evaluado y documentado el estado de la piel de su paciente, puede formular un plan de cuidado adecuado para mantener la integridad de la piel.